Calidad y confianza: Transformando ambientes con Nathalie
Luego de convertirse en diseñadora de ambientes en 2009, Nathalie Staebler incursionó en el mundo profesional sin esperar un segundo. Como una joven apasionada por transformar el entorno que le rodea, llevó su talento a dos empresas particulares que le enseñaron cómo una mujer de negocios enfrenta los retos. Hoy, una década después de graduarse, ha emprendido un camino que le ha conferido el honor de ser una de las diseñadoras referentes en Guatemala.
Nathalie es una de las fundadoras de Diseñarte, una empresa dedicada a diseñar y decorar espacios que garanticen el bienestar de sus clientes. Junto con su socia, Katina de Nes, realiza un trabajo que, además de satisfacer el estándar de calidad más alto, genera confianza entre sus clientes. Así explica la labor de su compañía: “Hemos hecho jardines, zapaterías, residencias y clínicas. También hemos trabajado con diseñadores, como el venezolano Ángel Sánchez. Este cliente ha sido uno de los que más he disfrutado, porque él diseña vestidos de novias. ¡La tienda tenía que salir impecable!”.
Aunque ha alcanzado a un nivel inimaginable, Nathalie sostiene que su trayectoria profesional no fue construida de la noche a la mañana. A su criterio, su habilidad para diseñar ambientes nació dentro de un ambiente muy especial: la UNIS. “Lo primero que me dio la U fue la alta formación profesional, que me ha permitido hacer un trabajo de alto nivel. He comprobado que salimos bien preparados, me ha tocado trabajar con profesionales extranjeros y no me he quedado atrás al hacer perspectivas a mano o vistas en 3D”, comenta.
La calidad educativa no es el único regalo que esta joven recibió en la UNIS. Para ella, la formación ética y humanística ha representado otro gran tesoro para la excelencia de su labor. Así lo cuenta: “Mis clientes me depositan grandes cantidades y yo soy quien lo administra. Allí aplico las enseñanzas morales de la U, que permiten que mis clientes confíen en mí y me llamen para más proyectos”.
Nathalie ha encontrado distintos retos en su carrera, como la ambientación de su propio hogar. Sin embargo, como una diseñadora incansable, los ha superado con creces. Hoy, tiene una recomendación para que los estudiantes de Diseño de Ambientes puedan salir airosos de sus obstáculos: “Escogieron la mejor carrera, porque uno es dueño de su tiempo. Les digo que se lancen y que no tengan miedo de empezar a trabajar y ganar experiencia, porque uno siempre tiene ángeles que lo ayudan”.
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