Estudiantes de Gastronomía realizan prácticas profesionales en el restaurante del chef ganador del premio «Comida Bella» de la revista Red Fork en El Salvador

La internacionalización es un aspecto muy importante para la formación de profesionales integrales, por ello, los alumnos de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales (FCEE) tienen la opción de realizar sus prácticas profesionales en el extranjero . Alberto Díaz y Omar Alejandro García son estudiantes de segundo año de la Licenciatura en Negocios Gastronómicos y tuvieron la oportunidad de aprender y trabajar al lado del chef Daniel Núñez, del restaurante de cocina de autor, Nómada, en El Salvador. 

La primera práctica que realizan los estudiantes de esta licenciatura es de plato frío, es decir, que se enfocan en corte de vegetales, sopas y salsas. Además, ambos jóvenes lograron conocer y poner en acción aspectos más avanzados de la gastronomía junto con profesionales de prestigio, como el chef Núñez, quien fue el ganador del premio “Comida bella” de la revista Red Fork. “Trabajé junto con el chef y desarrollé platos de autor en la temática del restaurante”, explica Alberto.

La cocina de Nómada se destaca por ser una mezcla de comida asiática con la hondureña y salvadoreña. “Trabajan mucho con platillos mediterráneos y usan ingredientes naturales. Tiene una característica silvestre”, menciona Alberto. Un ejemplo de esta combinación de sabores son los nachos que ofrecen, los cuales son masa muy delgada, como wantán, con uno de los platillos representativos de Honduras: ropa vieja. 

A lo largo del mes completaron 200 horas de prácticas, con turnos de ocho horas y en días muy ajetreados fueron de 15 horas. Para lograr cumplir con la exigencia del trabajo, lo aprendido en clase fue clave. “Las cátedras de Técnicas Culinarias Saladas 1 y 2 me enseñaron la base del conocimiento gastronómico”, comenta Omar Alejandro. Otra cátedra que les ayudó mucho en sus prácticas, resalta Alberto, fue Administración de Empresas, ya que le brindó los conocimientos necesarios para un mejor control de los inventarios. 

“Lo que se busca en estas experiencias es que los jóvenes aprendan en un entorno global, que tengan contacto con otras culturas, que crezcan tanto en el ámbito profesional como en el personal y hagan networking”, agrega la Lcda. Vanessa de Bran, coordinadora de PTI y movilidad internacional en la Universidad del Istmo (UNIS). Este último aspecto lo destacan los jóvenes, ya que lograron ampliar su red de contactos y abrir puertas al momento de buscar oportunidades laborales.

Ambos estudiantes concuerdan que esta es una experiencia muy enriquecedora para ampliar sus conocimientos y motivan a los demás estudiantes para que realicen sus prácticas en el extranjero. “Aunque representa un reto salir de la zona de confort, es una oportunidad para adquirir nuevas aptitudes y descubrir si en realidad están hechos para la gastronomía”, opina Omar Alejandro. Alberto agrega que es una carrera en donde se conocen las emociones de los demás para plasmarlas en un platillo y crear experiencias por medio de los sabores. 

¡Felicitaciones por haber completado sus prácticas internacionales! Les deseamos un futuro lleno de éxitos en el mundo de la gastronomía.