Futuros psicólogos ponen en prácticas sus conocimientos en la Clínica UNIS

Publicado por: Isabella Elizondo

“Lo que más me gusta de las prácticas es ver cómo mis pacientes superan los obstáculos que les afectan”, comenta Estela Franco, estudiante de último año de la Licenciatura de Psicología Clínica. Desde el primer año de la carrera los alumnos de la Facultad de Humanidades (FHUM) ponen en práctica todo lo que aprenden en clases.

La Clínica de la Universidad del Istmo (UNIS) permite que los alumnos tengan contacto con los pacientes, que aprendan a realizar diagnósticos e intervenir a partir del análisis y contrastación de resultados, mientras brindan un espacio en donde los pacientes pueden recibir la ayuda que necesitan. “Los padres de familia nos buscan, ya sea porque su hijo tiene un diagnóstico o presenta dificultades en casa o en el colegio”, explica Melissa Calderón, estudiante de tercer año de la Licenciatura de Psicopedagogía Clínica

Ambas concuerdan en que los catedráticos de la FHUM les dan el apoyo y las herramientas que necesitan para realizar un trabajo de calidad y cumplir lo mejor posible con las 1,200 horas de prácticas que realizan a lo largo de la licenciatura. “Durante estos cuatro años he tenido la guía de las profesoras y la directora de clínica, quienes me han dado oportunidades para ver que soy capaz de hacer un buen trabajo”, agrega Estela. 

Una herramienta esencial que utilizan los alumnos para el diagnóstico y la intervención es el banco actualizado de más de 100 pruebas psicométricas que tiene la FHUM. “Las pruebas nos dan datos cualitativos y cuantitativos para contrastar esta información con la historia clínica del paciente”, menciona Estela. Luego de esto ya se procede con la etapa de intervención, en donde se brindan técnicas y herramientas a los pacientes. 

Las pruebas deben ir acorde al paciente. Estela explica que en casos de niños con baja autoestima y rasgos de ansiedad, utilizó pruebas proyectivas, también pruebas psicométricas como la escala CMAS-R para evaluar la ansiedad y la prueba A-EP, la cual mide la autoestima. “La intervención la hice por medio de terapia cognitiva conductual y diferentes técnicas de arteterapia”. El objetivo de esto es que el niño trabaje los aspectos que no le gusta de sí mismo para que logre superarlos y fortalecer su identidad.

Por su parte, Melissa atiende adolescentes, uno de ellos con déficit de atención e hiperactividad. El paciente ya había sido diagnosticado, por lo que el proceso fue distinto. “Le realicé pruebas para evaluar su atención y conocer los puntos de mejoras y fortalezas”, comenta. Estos resultados la guiaron a identificar cómo intervenir. “No puede mantener la atención por más de cinco minutos, así que las intervenciones las enfoqué en trabajar y hacer descansos activos”. Además, se reúne con los padres de familia y los docentes del joven para darles recomendaciones de cómo apoyarlo en los estudios. 

Conforme los estudiantes avanzan en la carrera, los requerimientos de las prácticas cambian. Durante el séptimo semestre de la licenciatura realizan un trabajo de intervención, el cual consiste en evaluar y brindar técnicas y herramientas de acuerdo con las necesidades de los pacientes. Estela explica que en este periodo trabajará con tres pacientes y el próximo semestre hará el trabajo de evaluación en donde aplicará pruebas proyectivas y psicométricas.

El sistema de práctica permite a los futuros #HumanExpertsUNIS desarrollarse profesionalmente con seguridad. El conocimiento y esfuerzo de los estudiantes no solo aporta a la comunidad, también es una oportunidad para que conozcan cómo es la carrera y tengan mayor acercamiento al mundo profesional. “Disfruto mucho conocer cada vez más sobre la psicopedagogía y poder extender mi mano a todos mis pacientes”, concluye Melissa.

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